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Estos son los ejercicios en Recolectivo
Ejercicio 38: Refranero Popular
Ejercicio 33: Inocentes esperanzas
Ejercicio 31: Sueños de pueblo
Ejercicio 30: Héroes sin calle
Ejercicio 26: Egolatria Desinteresada
Ejercicio 25: Señales del Apocalipsis
Ejercicio 23: Miedo a los niños
Ejercicio 18: Otra forma de morir
Ejercicio 17: 27 de enero, 2059
Ejercicio 13: Recuento de daños
Ejercicio 12: Un toque de mota
Ejercicio 9: Rebelde sin causa
Ejercicio 7: Obsesiones infantiles
Ejercicio 6: Si tuviera una maquina del tiempo...
Ejercicio 4: Asústame panteón.
lunes, 17 de agosto de 2009
La Rifa
"Anda, pues" - Le contesté sin levantar la mirada de mi revista - "ya vete". Y se fué. Aquella noche estuve soñando con que iba en carretera, de noche, y había un loco delante mío, sacando una especie de lupa que proyectaba imágenes en las paredes del cerro usando los faros de mi coche. A ambos lados del camino había un río que serpenteaba, lleno de peces de colores y cada cuanto, había una especie de banquetas que esquivar. La visión me permanecía en la cabeza cuando me levanté, hambriento, a buscar algo. Arrimé el sillón a la ventana y enfocaba la mirada a los anuncios luminosos del centro, como si fuese a verla ahí, meneando las caderas, abrazada de Adrián, pensando en mi, haciendo planes mañosos en que miraría las pequeñas cuarteaduras del yeso que parecen ser dos danzantes prehispánicos, mientras que él la posee y ella llora por descubrir que aquel que embate no soy yo.
Entiendo. Mi ego se ha hipertrofiado. Tal vez por eso me costó tanto trabajo arrancarla de los brazos de aquel tipo y meterla en mi cama ya tantas veces. A lo mejor estaba muy bien equipado y ella solo venía a buscar variedad, a ayudarme a redactar, a convidarme de sus jugos. Si, eso debe ser. "Olvidemos el asunto" - mascullé, y me volví a meter a la cama. Maldita sea. ¿Por qué dejar tantas huellas en mi espacio?... no había reparado en la invasión hormiga de la que fuí objeto hasta entonces. El beso pintado en el espejo, el sobrecito de te negro, el estúpido peluche de la rana que vibra y pelos y pelos enredados en mi barba, en mis cobijas y en mis dedos. "Ojalá quede pelona" - Reí.
Cuando uno queda así, con el corazón sacudido, solo y sin sueño, pasan cosas. Recordé como fué que me esmeré en meterme entre sus piernas aquella vez. Partimos la rosca de reyes en el trabajo y ahí estaba, mi flamante sucesora con su equipo de noveles figuras. Ella empezó su derrota: He escuchado mucho de tí y ya quería conocerte. Lo demás, el tequila, la sobada de pantorrillas, ligera y erótica, las canciones desmadrosas y los malos chistes actuados... salimos juntos por vez primera y la llevé hasta mi colchón. De ahí pa´l real, todo fué una copia de la primera noche. El error fué no preguntar para tantear el terreno. Me enteré de la existencia del novio ya tarde, una vez que estábamos desnudos, riendo y entró la llamada. Ahí pasó. Van dos días desde entonces y todo se desmoronó tan rápido que no puedo evitar asomarme a la calle, esperando verte, deseando que yo esté mirando por la ventana para bajar a abrirte y comernos a besos en el pasillo. Pero nada. A recordarte y pintar escenas en mi cabeza, en que le dices toda la verdad a el tipo aquel y vienes, con tu mochila llena de cosas lindas, a dormir conmigo... la pregunta es... ¿te abriría la puerta?
Yo sé que es mi culpa. Que esta puerca tendencia a meterme en donde no me llaman siempre termina por hacerme llorar, pero hay cierto encanto en poseer algo que no es de uno, como dicen los sabios desde el principio de los tiempos "sabe más sabroso el tamal ajeno que el casero" Y yo, en una lucha infructuosa por dormirme de una buena vez, disfruto pensando en las combinaciones que logramos hacer en la cama. Pienso en que, de volver esta noche, iba a ensayar variantes de mis evoluciones en ella, con la finalidad de destruir a mi rival en su cabeza y en su corazón. Pero ya empieza a amanecer y no pasó nada. Ni esperó, ni me asomé... nada.
Por la mañana, ya más lloroso y reconociendo lo horrendo de mi papel, me preparé a terminar mi trabajo. Al lado de la computadora quedó el teléfono, sin batería. Al conectarlo me di cuenta. Ella estuvo abajo en más de una ocasión, llamando, enviando mensajes... en uno de ellos, dice, tal cual: "no quiero precipitarme, no he decidido irme con el, quiero estar contigo, te amo" Y yo, restablecido, guardo el teléfono y pienso, mientras me estiro contra el marco de la puerta "Largo de aquí, zorra".
Si, algo está mal con mi ego.
Entiendo. Mi ego se ha hipertrofiado. Tal vez por eso me costó tanto trabajo arrancarla de los brazos de aquel tipo y meterla en mi cama ya tantas veces. A lo mejor estaba muy bien equipado y ella solo venía a buscar variedad, a ayudarme a redactar, a convidarme de sus jugos. Si, eso debe ser. "Olvidemos el asunto" - mascullé, y me volví a meter a la cama. Maldita sea. ¿Por qué dejar tantas huellas en mi espacio?... no había reparado en la invasión hormiga de la que fuí objeto hasta entonces. El beso pintado en el espejo, el sobrecito de te negro, el estúpido peluche de la rana que vibra y pelos y pelos enredados en mi barba, en mis cobijas y en mis dedos. "Ojalá quede pelona" - Reí.
Cuando uno queda así, con el corazón sacudido, solo y sin sueño, pasan cosas. Recordé como fué que me esmeré en meterme entre sus piernas aquella vez. Partimos la rosca de reyes en el trabajo y ahí estaba, mi flamante sucesora con su equipo de noveles figuras. Ella empezó su derrota: He escuchado mucho de tí y ya quería conocerte. Lo demás, el tequila, la sobada de pantorrillas, ligera y erótica, las canciones desmadrosas y los malos chistes actuados... salimos juntos por vez primera y la llevé hasta mi colchón. De ahí pa´l real, todo fué una copia de la primera noche. El error fué no preguntar para tantear el terreno. Me enteré de la existencia del novio ya tarde, una vez que estábamos desnudos, riendo y entró la llamada. Ahí pasó. Van dos días desde entonces y todo se desmoronó tan rápido que no puedo evitar asomarme a la calle, esperando verte, deseando que yo esté mirando por la ventana para bajar a abrirte y comernos a besos en el pasillo. Pero nada. A recordarte y pintar escenas en mi cabeza, en que le dices toda la verdad a el tipo aquel y vienes, con tu mochila llena de cosas lindas, a dormir conmigo... la pregunta es... ¿te abriría la puerta?
Yo sé que es mi culpa. Que esta puerca tendencia a meterme en donde no me llaman siempre termina por hacerme llorar, pero hay cierto encanto en poseer algo que no es de uno, como dicen los sabios desde el principio de los tiempos "sabe más sabroso el tamal ajeno que el casero" Y yo, en una lucha infructuosa por dormirme de una buena vez, disfruto pensando en las combinaciones que logramos hacer en la cama. Pienso en que, de volver esta noche, iba a ensayar variantes de mis evoluciones en ella, con la finalidad de destruir a mi rival en su cabeza y en su corazón. Pero ya empieza a amanecer y no pasó nada. Ni esperó, ni me asomé... nada.
Por la mañana, ya más lloroso y reconociendo lo horrendo de mi papel, me preparé a terminar mi trabajo. Al lado de la computadora quedó el teléfono, sin batería. Al conectarlo me di cuenta. Ella estuvo abajo en más de una ocasión, llamando, enviando mensajes... en uno de ellos, dice, tal cual: "no quiero precipitarme, no he decidido irme con el, quiero estar contigo, te amo" Y yo, restablecido, guardo el teléfono y pienso, mientras me estiro contra el marco de la puerta "Largo de aquí, zorra".
Si, algo está mal con mi ego.
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Julio C324r,
Tres son multitud
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Nuestros bloggers no los selecciona el azar, ni un dedo en el cielo, ni un niño de la lotería nacional; nosotros los seleccionamos de acuerdo a su peculiaridad y estilo de escribir. Recolectivo no es un blog abierto a cualquiera pero tendremos invitados.
A continuación nuestra lista de colaboradores:
Srta. Pelo Irritante adolescente con complejo de Peter Pan. De calvita sexy y gracioso caminar. Aspirante a mimo. Ha usado el mismo par de zapatos en los últimos 7 años y sólo se baña los domingos .Dicen que es rara: lo es.
Freddymatico Zimmerman. Blogger de orejas perfectas y patillas de taquero. Sarcástico engreído de comentarios corrosivos. Egocentrico jactancioso con pretenciones de macho-alfa, de piel sensible y todo poderoso. En constante contacto con su lado femenino.
Huevo Luis, nada más. Blogger venido a menos. De niño creía que Chinampa era una ciudad, pero ahora ya no está seguro. Lo acusan de ser un montón de cosas, casi todas ciertas. Él es Luis, nada más.
Salaverga. Sonorense jocoso con ínfulas de mafioso siciliano. La versatilidad y el garbo de un exiliado voluntario, que a vivencias propias, sabe que puede ser más frío el desierto de un país decadente y avaricioso, que el mismo Rio Bravo en los raudales de agosto.
Mulder. Mediocre heroe del canal 5. Desempleado de final de temporada. Escritor de lo anormal y cazador de lo paranormal. Valiente captor del Chupacabras. Fiel amante de Scully y perseguidor de extraterrestres furtivos.
NEB. Publicista frustrado prófugo de los yermos publicitarios y desertor de la semiótica. Amante de lo kitsch y buena onda. De repugnante y nauseabundo sentido del humor.
Yo soy Ella. Costeñita en el exilio. Alcohólica en proceso con la habilidad para permanecer dormida largas horas ininterrumpidas. Con tendencia a caer y accidentarse. Los internets la odian y ella odia el aguacate.
Caballero. Televiso y comunicólogo. Locutor y productor de obviedades inherentes. El maestro limpio de los blogs,
autentico portavoz del proletariado con tildes de barrio bajo. Burgués desidioso con aspiraciones de Zabludovsky.
Kabeza. Monero nacido en el desierto y exiliado en el asfalto. Fuma para esconder el bigote y dibuja porque no le queda de otra. Extraña las tortillas de harina, por eso adopto a la Tía Rosa.
Plaqueta. Como no daba una socializando ni bailando salsa, tuvo que abrir un blog. Se dice que cuando muera encontraremos sobres de Splenda regados entre sus pertenencias. Ama tanto a los hombres que le gustaría ser uno, aunque la idea de ligar con mujeres la asquea (pinches viejas). Abusa de los paréntesis (por ejemplo).
Guffo. Su mayor temor es ver a Cepillín sin maquillaje y una vez llego hasta el nivel del pretzel en Ms. Pac-Man. Ha tenido una vida provechosa y llena de triunfos, como podrán darse cuenta.
Changos. Fiel practicante de la ley del mínimo esfuerzo. Inconforme estudiante de ingeniería. Inconforme hijo de familia. Naco, inculto y borrachín. Torpe y descoordinado. Tipo de pocas palabras y aspiraciones. Indispuesto al desarrollo si este implica abandonar la comodidad de la sombrita.
Rox. Computita manipuladora. Se le vio por última vez con una caja de cartón de leche Lala en el aeropuerto acosando extranjeros. Señas particulares: Pecas en las nalgas y tendencia a morder. Padece de sus facultades mentales.
Canibal. Chamaco de rancho. Flaco, prieto, panzón y alcohólico. Cuasimisógino. Amante de la crítica a lo wey y del mundo porno. A veces llora en las mañanas, cuando recuerda la muerte violenta de su perro Jicotillo... pero ya lo está superando.
LaMaga. Monógama rehabilitada. Sobrevivió al ataque de sus propios tacones teiboleros (ya no hay lealtad en este mundo). Fanática de los cuentos (los reales, los ficticios, los propios, los ajenos y sobre todo los que le han regalado a título personal). Le gustan las películas repetidas y los planes malévolos. Las fuerzas superiores la odian.
Perdidos en acción.
Falso Profeta. Lanchero Escritor enmascarado de alta nobleza. Blogstar de naturaleza sobrevalorada. Proveniente de modesta cuna pero con afanes de opulencia. Porque su sangre, aunque plebeya, también tiñe de rojo.
2 comentarios:
Mi HERMOSO y TATUADO bebe con senos.
El ego de un hombre. Hierelo y los atraeras. Inflalo y te reventara en la cara.
Me gusto mucho =)!
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